Con el mini-lifting malar, los pómulos se ven más definidos y elevados, el rostro adquiere un contorno más armónico y la piel luce más firme y tersa. Los resultados son duraderos y naturales, con cicatrices mínimas y apenas perceptibles, logrando un rejuvenecimiento elegante que potencia la belleza sin alterar tu expresión.
Con la lipo-transferencia malar, los pómulos se ven más voluminosos y contorneados, mientras la piel adquiere firmeza y frescura. Los resultados son duraderos, naturales y completamente integrados con tu anatomía facial, logrando un rostro más equilibrado, juvenil y luminoso que potencia tu expresión y confianza.
Con el mini-lifting mandibular, la línea de la mandíbula se vuelve más marcada y armónica, la piel luce firme y el rostro recupera su contorno natural. Los resultados son duraderos, discretos y con cicatrices mínimas, ofreciendo un rejuvenecimiento visible que resalta la elegancia y frescura sin alterar tu expresión.
Tras la intervención, el rostro luce más delgado y definido, con pómulos elevados y un contorno facial estilizado. Los resultados son duraderos, naturales y equilibrados, aportando frescura y proyección al perfil sin sacrificar volumen necesario para el envejecimiento a largo plazo. Es un cambio sutil pero poderoso que transforma la expresión y realza la elegancia del rostro.
Después de la blefaroplastia superior, la mirada luce más amplia y descansada, los párpados recuperan firmeza y se elimina la sensación de “peso” en los ojos. Las cicatrices son mínimas y casi imperceptibles, asegurando un resultado natural, duradero y en perfecta armonía con el rostro.
Tras la blefaroplastia inferior, las bolsas desaparecen, la piel luce más tersa y los ojos recuperan luminosidad. El resultado es una mirada más descansada, joven y armónica, con cicatrices mínimas y prácticamente invisibles, garantizando un cambio duradero y natural.
